El BCE sube los tipos de interés al 4% y empeora sus previsiones de crecimiento e inflación

El Banco Central Europeo (BCE) ha anunciado hoy una nueva subida de los tipos de interés de referencia para la zona euro de un cuarto de punto, hasta el 4%, en un intento de contener la escalada de los precios que supera el 5% interanual. Se trata del quinto incremento consecutivo desde que el organismo inició el ciclo de endurecimiento monetario en junio del año pasado.

La decisión del BCE se ha tomado en un contexto de deterioro económico y social en la región, que entró en recesión técnica en el tercer trimestre de 2022 y que afronta una crisis energética, una pandemia persistente y unas tensiones políticas crecientes. El presidente del BCE, Christine Lagarde, ha reconocido que las perspectivas para la zona euro son «más sombrías» y ha empeorado sus previsiones de crecimiento e inflación para este año y el próximo.

Según las nuevas proyecciones del BCE, el Producto Interior Bruto (PIB) de la zona euro se contraerá un 0,4% en 2022 y crecerá un 1,8% en 2023, frente al 0,1% y el 2,1% previstos anteriormente. La inflación, por su parte, se situará en el 5,2% este año y en el 3,1% el próximo, muy por encima del objetivo del 2% que persigue el BCE y de las estimaciones anteriores del 4,8% y el 2,6%, respectivamente.

Lagarde ha admitido que la subida de tipos tendrá un impacto negativo sobre la actividad económica y el empleo, pero ha defendido que es necesaria para preservar la credibilidad del BCE y evitar «efectos de segunda ronda» que alimenten las expectativas inflacionistas. Asimismo, ha anticipado que es «muy probable» que el BCE vuelva a subir los tipos en su próxima reunión de julio, salvo que se produzca un cambio «importante» en las condiciones económicas o financieras.

La presidenta del BCE ha señalado que el organismo seguirá vigilando de cerca la evolución de la inflación y los riesgos para la estabilidad financiera, especialmente los derivados del sector de la banca en la sombra. También ha instado a los gobiernos a adoptar medidas fiscales y estructurales que apoyen la recuperación económica y faciliten la transición ecológica y digital.

La reacción de los mercados a la decisión del BCE ha sido mixta. El euro se ha apreciado frente al dólar y se ha situado por encima de los 1,15 dólares. Las bolsas europeas han registrado caídas moderadas, mientras que la rentabilidad de los bonos soberanos ha aumentado ligeramente.